¡Hola chic@s!
Verano, vacaciones, pereza... ¿Resultado? ¡El descuido del cuidado de nuestra boca!
La llegada del verano no tiene por qué significar que descuidemos nuestra salud bucal y periodontal, pero, por experiencia, lo es...
En vacaciones no seguimos nuestra rutina diaria y se nos olvida cepillarnos los dientes tantas veces como deberíamos, comemos más fuera de casa, el vino, el tabaco, el alcohol, los refrescos... Todo daña nuestros dientes.
Seamos sinceros ¿nos llevamos el cepillo de dientes de vacaciones? No.
Placa bacteriana
En verano aumenta el riesgo de acumulación de la placa bacteriana y empeora la salud de nuestras encías ya que no prestamos la misma atención a nuestra boca.
Halitosis
La mala o falta de higiene bucal en vacaciones, el consumo de bebidas alcohólicas y el tabaquismo aumenta o empeora considerablemente la halitosis.
Es muy importante beber agua en verano no solo para hidratarnos, sino también para mantener un buen flujo de saliva y evitar la halitosis...
Hipersensibilidad dental
Verano + calor = helado. Pero ¡ais como duele!
La llegada del verano hace que aumentemos el consumo de bebidas y alimentos fríos lo cual puede repercutir en nuestra boca tengamos o no problemas previos.
¿Y las férulas?
Otro de los problemas de verano más frecuentes, especialmente en quienes utilizan ortodoncia es el olvido de las férulas en casa...
Los que las utilizáis sabéis lo importantísimas que son y que debéis llevarlas el mayor tiempo posible así que ¡échalas a la maleta y no te lleves sorpresas al volver!
Para evitar que se te olvide (queriendo o sin querer) el cepillo de dientes en casa puedes comprar un kit de cuidado bucal de viaje y tenerlo solo para estas ocasiones así, cuando hagas la maleta, lo echarás en falta ¡y cuidarás tu boca también en verano!
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